Derrota ajustada y serie abierta

Independiente perdió 1-0 frente a Santos por el encuentro de ida correspondiente a los octavos de final de la Copa Sudamericana. Panorama complicado para los de Julio Falcioni, quienes están obligados a ganar en una semana como local.

Para el estreno en el semestre, el Emperador sostuvo el esquema utilizado en los amistosos y no se inclinó por los cinco defensores. Y el primer tiempo fue bueno. Se vieron aspectos interesantes del juego, como la presión alta, el desdoble de los extremos y las situaciones generadas.

Si bien esos primeros 45 minutos fueron chatos, el Rey de Copas no pudo sacarle provecho a sus insinuaciones por malas decisiones, como las que tuvieron Sebastián Palacios, Alan Velasco y Silvio Romero. En tanto que el local explotaba los costados y solo tuvo dos que detuvo bien Sebastián Sosa.

Todo lo bueno que había hecho el Orgullo Nacional no pudo replicarlo en el complemento. Se partió el equipo, la presión mermó y la virtud del rival comenzó a arrinconar al Rojo. Fue así como luego de un par de salvadas del uruguayo, Kaio Jorge capturó el único rebote que dio Sosa y sacó provecho a los 24′. 1-0 para el local y merecido por lo realizado hasta entonces.

Con la ventaja, el Peixe bajó la intensidad y le fue cediendo el protagonismo a Independiente. Ahí apareció lo mejor del visitante. Al Chino le anularon un gol por un offside finito, Andrés Roa y Jonathan Herrera también estuvieron cerca y el propio capitán lo pudo haber empatado sobre el final con una gran ejecución de tiro libre que hizo lucir a Joao Paulo.

Si bien la derrota fue por la mínima y eso es un punto favorable, el Rojo no pudo anotar el gol de visitante de cara a la vuelta. Santos llegó a este cruce con muchísimo más rodaje encima y por momentos no se notó. La serie quedó abierta y el pasaje a cuartos se definirá el próximo jueves en el Libertadores de América. ¡A darlo vuelta en casa!