Eduardo Domínguez tomó decisiones importantes en el regreso a los entrenamientos en el predio de Villa Domínico. Una de ellas fue poner un ultimátum en las situaciones de 3 futbolistas.
La primera medida fue separar a 9 jugadores del plantel y notificarles que deberán buscarse club. La segunda fue conversar con Gastón Togni para informarle que corre de atrás y lo mejor es una salida. Y la última es un mensaje no solo a los tres involucrados, también a los dirigentes.
Domingo Blanco, Andrés Roa y Carlos Benavidez permanecerán entrenando con el grupo, pero no jugarán hasta definir sus situaciones contractuales.
Blanco todavía no respondió la propuesta que le presentó el club. Roa y Benavidez son las más complicadas que deberá afrontar la dirigencia del Rey de Copas.
A ver los cráneos que votaron a estos sucios delincuentes…A hacerce cargo…salames.
Mingo, ya está nadie mejor que vos sabe lo que es Independiente, si hay un momento para desaparecer de ahí es ahora, hay que renovar el aire y las posibilidades económicas, aprovecha amigo este es el momento, acá en Punta te apreciamos y d seamos lo mejor para vos y tu familia, abrazo.
Lo que deja a las claras la decisión de Domínguez es que ante tantos y tantos desaciertos de los Moyano, queda en evidencia uno más y es el bajísimo nivel de las inferiores. Sin proyectos serios, sin gente de real valía, simplemente un montón de jugadores del montón, sin el nivel que merece un gigante como el Rojo, divisiones inferiores conformadas por hijos, sobrinos y acomodados de dirigentes, ex jugadores, parientes todos. En el país hay miles de pibes que con diez, once, doce años la rompen, son excelentes proyectos. Claro, terminan ahí, en su pueblo, en su ciudad. En Independiente no hay nadie que los vaya a buscar. Una vergüenza como han destruido al club estos camioneros inservibles y corruptos.
Que se vayan todos los dirigente corrupto que estan destruyendo mi mi querido rojo de avellaneda