Independiente cayó 1-0 ante Gimnasia La Plata por la fecha 3 del Torneo Clausura y ya es el cuarto partido que arranca perdiendo.
Si algo destacaba el Rojo durante el primer semestre era que, a pesar de jugar con sus líneas tan adelantadas y metidas en campo rival, le llegaban y convertían poco. En esta segunda parte del año, todo se dio vuelta.
El Rey de Copas no solo generó poco en los primeros cuatro partidos, sino que fue endeble en defensa. De hecho, tanto con Gimnasia de Mendoza por Copa Argentina, como con Sarmiento, Talleres y el Lobo por el campeonato local, los de Julio Vaccari comenzaron abajo en el resultado.
¿Se debe a la falta de compenetración que antes existía con Federico Vera, Kevin Lomónaco, Sebastián Valdéz y Álvaro Angulo? Es probable. ¿El mediocampo conformado por Iván Marcone, Felipe Loyola y Luciano Cabral no garantiza precisión y dinámica en la gestación de juego? Posiblemente. ¿Los extremos que ayudaban a los laterales en la marca lentamente dejaron de hacerlo? También. Mucho por trabajar, Independiente.