Nos vamos de parranda

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Avellaneda está de fiesta, porque el Rojo volvió a demostrar quien es el que manda en el barrio. Independiente goleó a Racing por 4 a 1 en el Libertadores de América con dos goles de Facundo Parra, otro de Patricio Vidal y el último de Patricio Rodríguez. Los dirigidos por Cristian Díaz adelantaron el baile del sabado por la noche y se fueron de PARRAnda a las 12 del mediodía.

Para ser sinceros Independiente lo pasó por arriba, pero las cosas no comenzaron bien para el Diablo ya que al comienzo del partido por exceso verbal el árbitro Sergio Pezzotta expulsó de la cancha a Cristian Díaz. Al DT del Rojo no le gustó la tarjeta amarilla tempranera a Fernando Godoy y se fue de boca. Igualmente el equipo se adueñaba de la pelota y controlaba el partido sin generar situaciones de peligro claras.

A partir de los 20 minutos el conjunto de Basile comenzaba a tomar protagonismo. Se paró mejor en el terreno de juego y empezó a robarle la pelota a Independiente. Racing aprovechaba a salir rápido con pelotazos a espaldas de los centrales y de esa forma llegó el primer gol del partido. A los 26 minutos  Gabriel Milito pifia en el rechazo y aprovechó de buena manera Gabriel Hauche habilitando a Teofilo Gutierrez que solo tuvo que empujar la pelota a la red para poner el 1 a 0 parcial en favor de la Academia.

A pesar del 1 a 0 en contra, Independiente no se cayó anímicamente y fue a buscar con todo el empate. El premio lo tuvo a los 36 minutos luego de un tiro libre ejecutado por Osmar Ferreyra que la defensa de Racing no pudo sacar. El balón quedó en los pies de Julián Velázquez quien controló la pelota y habilitó a Facundo Parra que con un remate alto y potente venció al arquero Saja. El partido se ponía 1 a 1 y el Rojo emparejaba las cosas.

Racing sacó del medio y en una jugada de tres toques, Hauche quedó solo frente a Gabbarini, pero el delantero definió por arriba del travesaño ante la salida del arquero. Esto era una clara señal de que la suerte estaba del lado de Independiente. Se fue la primera mitad del partido, en donde el Rojo comenzó mejor pero el empate hasta el momento era el resultado más justo.

En el segundo tiempo Independiente salió con otra cara. Se pudo ver una versión mucho más agresiva para comerse al rival de turno, el clásico de toda la vida al cual con tirarle la historia encima se podían conseguir los tres puntos. El Pato Rodríguez y Lucas Villafañez se juntaban para hacer diabluras y Facundo Parra mostraba su mejor versión, esa que por Avellaneda no se veía hace mucho.

A los 13 Villafáñez encaró por derecha llegando hasta el fondo, tiró el centro atrás y cuando Patricio Rodríguez iba a definir, Bruno Zuculini con un leve empujón lo desestabilizó y Pezzotta compró el penal y expulsión al volante de Racing. Facundo Parra no tuvo piedad y los cambió por gol. El Rojo se ponía en ventaja 2 a 1 y lograba dar vuelta el partido.

Al rato, ante el toqueteo de los jugadores del Rojo, los de Racing comenzaron a impacientarse y meter la patita fuerte. En ese descontrol, Teo Gutiérrez insulta al árbitro y deja a su equipo con 9 hombres.

En ese momento el Libertadores de América ya era una fiesta. Por unos minutos el Rojo sufrió ya que Racing consiguió dos tiros de esquina en donde pudo darle la igualdad a su público que sólo se dedicaba a observar una nueva derrota.

Pero todavía faltaba lo mejor, las dos frutillas del postre. El 3 a 1 parcial lo marcó Patricio Vidal, quien volvía a jugar luego de una lesión que lo marginara algunos partidos. Y luego llegó el turno del otro Pato, si Rodríguez con un verdadero golazo puso el 4 a 1 final.

Para que la fiesta sea completa, el vestuario de Racing terminó en escándalo: un dirigente increpando a Teo, peleas entre propios compañeros, una pistola de juguete y la posible renuncia de Basile que todavía no es oficial.

El pueblo Rojo esta de PARRAnda y demostramos que somos los DUEÑOS DE AVELLANEDA.

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