El campo de juego del Libertadores de América lució en un pésimo estado. Es que anoche, se realizó un acto de la Iglesia Mormona de La Matanza que estaba pactado desde hace meses y le dejó un buen dinero a las arcas del Rojo.
Si bien el público que asistió al evento se ubicó en las tribunas Norte Baja, Norte Alta y Erico Baja, el escenario principal estuvo en la mitad del campo de juego y por el mismo transitaron cientos de personas desfilando y bailando.
Hace meses que el terreno del Libertadores no está apto para jugar. En este torneo sufrió la suspensión por lluvia en el encuentro frente a Vélez y sobre el final del Clausura el ex entrenador Cristian Díaz fue muy crítico sobre la cancha.
Esta tarde se vio la peor imagen de la cancha, con más barro y arena que cesped. Algo que se debe mejorar y ponerse a trabajar de formar urgente.
