Diego Vera no busco refugio tras el empate con Estudiantes en el Libertadores de América y aceptó que Independiente jugó muy mal. Además, se lamentó por el penal en contra que le sancionaron a Gustavo Toledo: “Eso nos mató”.
“No hay excusas, porque con un hombre de más no pudimos hacer un gol”, arrancó el uruguayo ni bien se había consumado la igualdad. “No hay ningún reproche. Tenemos que aprender, seguir y ganar. Tuvimos la pelota, pero no fuimos claros para convertir. Sobre el final en lugar de meterla en el área la tocamos”, añadió más tarde, y reconoció que se plantearon “tener paciencia” porque en los partidos anteriores no la habían tenido. “Tratamos de hacerlo mejor, pero no nos salió”, confesó.
Por último, el goleador aseguró que el penal en contra fue totalmente lapidario para el Rojo, que se había puesto en ventaja minutos antes con un gol suyo. “En la jugada anterior no se cobró una mano dentro del área de ellos y en la nuestra sí. Es una lástima porque teníamos el partido uno a cero a nuestro favor. A lo último había que concretar porque había que hacer el segundo. Hoy teníamos la ilusión de ganar, estuvimos cerca, pero el penal nos mató”, cerró.
