Independiente cayó 1-0 ante un Lanús que jugó todo el segundo tiempo con 10 hombres en el Libertadores de América y perdió una buena oportunidad para quedar puntero de la Liga Profesional ante un competidor directo. En LocoXelRojo analizamos las claves de la derrota.
- No aprender del pasado: el conjunto de Luis Zubeldía planteó el mismo partido que el último antecedente en febrero, donde también se impuso por la mínima con un gol de cabeza proveniente de una pelota parada. Se dedicó a bloquear y romper con faltas las líneas de juego del Rojo y apeló a sus dos torres en la delantero con centros y desbordes desde los costados. Así, nuevamente mantuvo la valla invicta y se llevó el triunfo.
- ¿Funciona la vuelta del Perro?: Lucas Romero es un jugador fundamental, el único 5 tapón del equipo, pero en los anterior cotejos el medio compuesto por jugadores de no tanta marca se había vuelto dinámico y sorpresivo. Ayer, fue muy estático y esquemático el parado del mediocampista central, Domingo Blanco a la derecha y Soñora de la izquierda para el medio. A pensarlo.
- No supo jugar con el hombre de más: tras la expulsión de Tomás Belmonte, se esperaba que los locales dominaran y metieran en el arco al Granate en la segunda parte, algo que no sucedió. Con 10, los visitantes se replegaron aún más y el Rojo, sin ideas, no pudo romper la defensa y generar peligro.
- Erró las pocas que tuvo: en un encuentro parejo donde chocaban dos equipos que peleaban por la cima del torneo, nadie regala nada. Independiente tuvo contadas situaciones de gol y no las pudo concretar. Dos remates de Fabricio Bustos y Mingo pasaron cerca y la más clara fue el cabezazo de Silvio Romero junto con el de Rodrigo Márquez que sacan en la línea en el segundo tiempo.
- Pelota parada: el karma desde que Julio Falcioni volvió a conducir al Rojo. Un gran porcentaje de los pocos tantos recibidos en su ciclo fueron mediante esa vía. Pese a tener centrales con buen juego aéreo, no se agarran bien las marcas y Sebastián Sosa es un arquero que tiende a quedarse debajo de los tres palos.
- Otra derrota contra un rival directo: una crítica que se desliza es que en el Rey de Copas no logra vencer a los equipos que pelean en la parte alta de la tabla, los famosos partidos importantes. Sin ir más lejos, en la pasada Copa de la Liga no se le ganó a ninguno de la mitad para arriba. Muchos empates y caídas claves contra competidores que van por el mismo objetivo.
