En una muy floja actuación en el Clásico de Avellaneda, Independiente perdió 1-0 ante Racing en el Estadio Libertadores de América – Ricardo Enrique Bochini, por la fecha 7 de la Copa de la Liga.
Empezó con todo, se pinchó rápido, le hicieron un gol y no supo cómo lastimar. Esa fue la síntesis de un clásico para el olvido, donde el Rojo no pudo imponer condiciones ni hacer pesar la localía en un estadio repleto. Tuvo buenos momentos (muy pocos) y no los aprovechó.
De entrada parecía que el equipo de Carlos Tevez se llevaba puesto a su máximo rival. Con un Alex Luna intratable, pisó varias veces el área de Gabriel Arias y acorraló a la Academia en los primeros minutos. Pero quedó sólo en intenciones. Se desinfló muy pronto. Un cabezazo desviado del propio Luna y un buscapié de Gabriel Ávalos que nadie conectó, fueron las únicas acciones de peligro.
La Academia, por su parte, supo que el punto débil del Rey de Copas estaba en la banda derecha. Así fue cómo Maximiliano Salas encontró el espacio para filtrarse y rematar, pero Rodrigo Rey le tapó el disparo. Minutos después, el arquero del Rojo volvió a lucirse saliendo a cortar cuando quedaban dos hombres de Racing mano a mano. Con sabor a poco y mucho vértigo, el primer tiempo terminó sin goles.
En el complemento, el equipo de Tevez se quedó y dejó jugar a los de Gustavo Costas, que con mucha paciencia lograron manejar la pelota. De esa manera, el partido se desniveló a los 18 minutos, cuando Bruno Zuculini le metió una habilitación notable a Adrián “Maravilla” Martínez (sí, el mismo que estuvo cerca de venir al Rojo en el último mercado de pases), quien eludió a Rey y marcó el 1-0. El juez de línea cobró offside, pero el VAR convalidó el gol.
A partir de ahí, Independiente fue pura impotencia. No tuvo fútbol ni ideas para inquietar a Arias, más que los pelotazos a un Gabriel Ávalos muy aislado que jugaba a espaldas del arco. Para colmo, las variantes del DT restaron más de lo que sumaron. Santiago Toloza, Ignacio Maestro Puch y Matías Giménez no cambiaron la ecuación en ataque.
Aproximaciones hubo apenas dos. Una buena combinación de Toloza con Isla terminó en un remate débil de Maestro Puch a las manos de Arias. La otra fue un tiro libre de Federico Mancuello que pasó cerca del ángulo superior izquierdo. Y eso fue todo.
Racing tuvo una más en los pies de Agustín Almendra, con un remate cruzado que casi termina en el 2-0. Y sobre el final, la gran polémica: en tiempo de descuento, pareció mano de Facundo Mura cuando Ávalos intentaba eludirlo, pero el VAR no le avisó nada al árbitro Facundo Tello para que, al menos, la fuera a revisar.
El clásico terminó siendo para la Academia, que con poco (pero merecidamente) se llevó 3 puntos de Alsina y Bochini. Del lado del Rojo, bastante para trabajar y corregir.
