Sincero, reflexivo y autocrítico. Así se lo escuchó a Martín Benítez esta tarde en diálogo con InfiernoRojo Radio, donde dio a conocer los motivos de su merma en el rendimiento que lo alejó de las canchas durante 162 días.
“Se me fue la cabeza y me descuidé. Hoy me puse en mente que no tengo que hacer más las cosas que hacía a los 17 años”, explicó el atacante.
Desde el encuentro con Boca por el Torneo Final habían pasado 19 partidos sin que Benítez vuelva a jugar. Hoy, y luego de una profunda autocrítica, el delantero dio a conocer las razones: “Se me acercó mucha gente que cuando no jugaba en Primera no estaba. Yo tengo lejos a mi familia y no me ubiqué. No me enfoqué como lo hacía en inferiores”. Y luego añadió: “Se me fue la cabeza para cualquier lado y me descuidé”.
Sin embargo, el jugador surgido de las divisiones inferiores reconoció: “Cuando viajé a Misiones hablé mucho con mi familia y empecé a analizar por qué no jugaba. Algo estaba haciendo mal. En un momento había engordado 4 kilos y eso en el fútbol es dar ventaja. Me costó mucho llegar a Primera y no podía tirar todo por la borda en un año y medio”.
Además, Benítez advirtió que reaccionó a tiempo y así logró salir adelante: “Por suerte me di cuenta y noto que es impresionante la diferencia. Pude bajar de peso y el cuidado en esta carrera es muy importante. Me apoyo mucho en mi familia y trato de hablar con mis compañeros para darles consejos”.
Para el cierre, el atacante dijo que la victoria frente a Huracán ayudará mucho en los aspectos anímico y mental e hizo referencia a su rendimiento personal luego de su prolongada inactividad. “En lo personal fue muy lindo volver a jugar. No di todo lo que puedo y tengo que confiar más en mí. El otro día pedí muchas pelotas pero nunca bajé los brazos ni me escondí”, concluyó.
