Ezequiel Barco se refirió al penal que malogró contra Lanús y reconoció que hubo un momento de incertidumbre porque se demoró más de la cuenta la ejecución desde los doce pasos.
“Después del penal, quedé dolorido porque fue decisivo para nosotros para poder entrar a la Copa Libertadores”, comenzó en diálogo con Sportia. Y luego agregó: “En el transcurso que el arquero estaba lesionado, se hizo muy largo el penal, dudé, pero ya era tarde para decirle a un compañero que venga a patear”.
Y cuando fue consultado por quién iba a ser el encargado de patear el próximo penal en el Rojo, Barco manifestó: “Si bien los chicos me dijeron que lo iba a patear otro, yo les dije que la iba a agarrar yo la pelota”.
Por otro lado se refirió al escándalo que se generó con la Sub 20 y fue determinante: “Me quedé con ganas de ir a jugar el Mundial, pero fue una decisión institucional y siempre tuve la cabeza puesta en Independiente”. Y para cerrar, Barco completó: “Yo no tuve ningún inconveniente con ningún chico de la Sub 20 ni con el cuerpo técnico”.
