Hilario Navarro no es de dialogar con la prensa, tal vez porque recientemente recuperó la titularidad (igualmente el sábado ante All Boys Mohamed ya confirmó que ataja Gabbarini) o simplemente porque es un jugador de perfil bajo y de pocas palabras.
Sin embargo, luego de ser uno de los principales artífices de esta victoria frente a Racing Club, el “Flaco” se detuvo a hablar con LocoxelRojo y el resto de los medios masivos de comunicación. De entrada, el arquero destacó que “hay que trabajar siempre al 100% y el técnico ya nos dejó en claro que a mí me iba a tocar hoy y a Gabbarini el sábado. Hay que trabajar entre todos y, al que le toque, estar listo.”
En cuanto a lo que significa para él un partido tan importante, Hilario reconoció: “sabíamos que era un partido especial, un clásico de barrio en donde se jugaban muchas cosas. Un partido importante para la gente y para nosotros en donde por suerte las cosas se dieron como esperábamos.”
Respecto a su balance personal, el arquero dijo: “cuando uno llega a su casa tranquilo, analiza las cosas, en la posición que me toca trato de hacer lo mejor y traté de brindar lo máximo para que no nos convirtieran y se logró un triunfo muy importante.”
Sobre el final del partido y tras el pitido de Lunatti, el arquero se abrazó con Adrián Gabbarini. Ante dicha observación, Hilario marcó que “con Gabbarini nos deseamos lo mejor, hacemos fuerza para que al otro le vaya bien. Tenemos una relación buena entre todos y con Gabba venimos siempre a entrenar juntos y charlamos sobre los partidos que se vienen. No le tocó atajar en su cumpleaños y es una alegría que le toque atajar el sábado”, se sinceró.
Si bien el arquero fue una de las figuras del partido, le costó elegir una atajada particular. “Todas las atajadas son clave e importantes porque sino la tenes que ir a buscar adentro. Hay partes del partido en el 0-0 en donde ellos tuvieron situaciones; se abrió el marcador, logramos convertir primero y aguantamos para que no nos conviertan.”, explicó.
Cuando le dieron el término de “Figura”, el arquero no se sintió identificado. “No me sentí figura, no por humilde sino porque uno tiene que hacer lo mejor siempre y sabe cuando las cosas le salen bien o no. Si antes del partido me preguntabas cómo quería que me salgan las cosas, uno siempre se imagina el partido la noche anterior así. Salió todo bien y hay que salir adelante”, deseó.
A futuro, Hilario se planteó solo sumar de a tres. “El objetivo nuestro es tratar de levantar a partir de ahora, sabemos que el cuerpo técnico vino en un momento muy difícil en la semana previa al clásico, un plantel golpeado. Por suerte ganamos y esperemos a partir de ahora empezar a festejar más”, concluyó.
